miércoles, 20 de abril de 2011

Curso de Bufón en Mayo

Hola amigas(os),
aprovechando que es semana santa, y los bufones se van a sus cuevas y inframundos, anunciamos su vuelta semana que viene, en la semana de la carne y la filosofia, para un curso en La Estupenda, al final del curso Los Bufones de Cartuja, entidad con fines lucrativos cima de los de la iglesia, hará una breve y intensa presentación de su ultimo numero.
Salud Sarcasmo y Sexo
Los Bufones de Cartuja



Bufón - el arte del grotesco
Viernes sábado y domingo
6, 7 y 8 de mayo
70 euros
descuento de 10% para alumnos de la Escuela.

Objetivo

Descubrir y jugar con los aspectos grotescos y oscuros de la personalidad humana a través de una metodología específica del mundo del bufón, su manera particular, ácida y inteligente de ver el mundo que nos rodea. Burlarse de la orden establecida, del estado y del poder. Reírnos de nosotros mismos, del amor y del dolor.
¿Como acercarse a eso?
En un principio generando misterio, peligro y inquietud para el público. Esconder algo. Compartir y jugar mediante la risa... o reírse del juego.

Programa

· Acercamiento a la Danza Butoh y sus dinámicas de entrenamiento;
· El Entrenamiento Energético;
· La metamorfosis corporal; crear un cuerpo nuevo, una estética distinta;
· La imaginación y la parodia de los hechos reales;
· El bufón solo en escena;
· El Bufón y el colectivo;
· Los tipos de bufón, investigación y desarrollo de sus características;
· Trabajo con la voz - Las convenciones: falsetes y resonadores; rupturas, de la risa a la voz. El Gramelot; el esperanto;
· Golpes. La precisión en el golpe. Las patadas.
· Manipulación de objetos.
· Los coros y marchas cómicas.


Otras características


Es una especie rara de juglar: cuenta para, paulatinamente, verse implicado en su historia. Empleo de la amabilidad y del virtuosismo. Travieso y picaresco. Dinamizador de escena: crea acciones – voz / sonoridad / gesto / plasticidad / corporeidad / juego/ escucha.
Tiene la necesidad de crear una empatía con el público.
Malformación, fealdad e inteligencia.
Andan en bando. Cambian de carácter todo el momento para conquistar el publico. Enaltecen la oscuridad, la gula, la opulencia, la miseria, la degradación, el sometimiento y la burla.

Bufón – referentes bibliográficos


Qué es el bufón?
 
Se entiende por bufón a aquellos personajes de carácter cómico que trataban de divertir a reyes y a cortesanos con chanzas y gestos más o menos ridículos, propiciados por su figura deforme, fuera de lo normal, y por su fina inteligencia.
El papel desarrollado por el bufón tiene sus orígenes en la Antigüedad, pues se tiene noticias de su existencia por las pinturas descubiertas en Egipto y en la Magna Grecia, y en Roma por los testimonios de escritores romanos como Suetonio, Séneca y Marcial. Sin embargo fue en la Edad Media cuando los bufones adquirieron un papel relevante en la sociedad. Bufones, trovadores y juglares se dedicaban a actuaciones de divertimiento, si bien cada uno de ellos con características propias: la del bufón era causar la risa del público. Algunos bufones cortesanos adquirieron fama mundial, entre ellos, cabe destacar a Geoffroy, Triboulet y Thévenin de St. Leger en Francia; a Will Somers, en Inglaterra y a Don Nicolasito con Felipe IV, en España. Se dice que hasta Atila, rey de los Hunos, llevaba un bufón entre su séquito. Como institución cortesana, los bufones desaparecieron de las cortes con la caída del absolutismo real. El papel de los bufones era divertir y hacer reír a reyes y cortesanos. Pera ello, se servían de todos lo medios que tenían a su alcance, entre los que sobresalía su propia deformidad. Cuando se presentaban y mostraban en público sus malformaciones físicas o sus aparentes anormalidades psíquicas, producían en los espectadores el placer de que no se sintieran como uno de ellos. Su misma presencia ya provocaba risa. Pero, además, los bufones podían ser personas deformes, pero eran seres especialmente dotados, la mayoría de las veces, de una inteligencia poco común, según demostraban sus ocurrencias, sus chistes y, como no, sus afiladas ironías. Para los espectadores, eran personas que realizaban con dignidad su papel histriónico, y, por ello, eran apreciados. Los bufones cortesanos percibían un salario digno como empleados de la corte y llevaban una vida mucho más digna y segura que vagabundeando por las calles de las ciudades.
 

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